Por qué el MRV (monitoreo, reportaje y verificación) es buena idea

En esta segunda semana de la Cumbre de Cambio Climático de la ONU, todos seguimos en la expectativa de que logremos alcanzar un acuerdo sobre el cambio climático. Todo parece indicar que se pueda lograr un acuerdo en un elemento clave: el MRV (monitoreo, reportaje y verificación).

El MRV es, en pocas palabras, un sistema de supervisión para realizar un seguimiento y verificar quién está haciendo qué. Un acuerdo proporcionaría un sistema de evaluación independiente para determinar si los países están cumpliendo con sus compromisos para reducir la contaminación del calentamiento global.

En pasadas negociaciones y ahora en Cancún, MRV ha sido un escollo, con la insistencia de Estados Unidos que MRV debe formar parte fundamental de cualquier tratado de clima internacional y algunos países, como China, oponiéndose el año pasado en Copenhague, argumentando que cualquier régimen de inspección podría afectar a su soberanía.

No obstante, como escribió mi colega Jake Schmidt, "un sistema fuerte, creíble y transparente para el seguimiento de las emisiones de gases de efecto invernadero y las acciones de un país es una parte esencial de cualquier sistema para combatir el cambio climático y es un imperativo para la Cumbre del Clima de Cancún".

Esta semana, NRDC lanzó un nuevo conjunto de recomendaciones sobre cómo mejorar el actual sistema de "seguimiento de carbono  y acciones" de los países (disponible AQUÍ).

NRDC siempre ha propuesto que tener un sistema sólido, transparente y responsable de MRV beneficiará a todos los países haciendo público sus avances hacia el control de las emisiones. Como explica el Jake Schmidt MRV permitirá a los países a obtener el reconocimiento mundial que merecen para reducir su contribución al cambio climático. Un sistema de este tipo también ayudaría a países con su aplicación nacional al proporcionar información precisa, actualizada y creíble y una base sólida para las decisiones políticas y una manera clara para identificar áreas de mejora.

Y ahora parece que por fin importantes actores globales se están empezando a poner de acuerdo.

China por ejemplo ha empezado a indicar que el país está dispuesto a ser más transparente sobre su política sobre el cambio climático. Xie Zhenhua le dijo a la agencia Reuters, “ [s]abemos ahora que en el pasado hemos tomado medidas, pero no le hemos dicho nada a nadie acerca de ellas…ahora pensamos:’ si hemos hecho algo, por qué no decirlo? Lo que China ha hecho, lo que no lo ha hecho, qué dificultades enfrentamos, estoy dispuesto a decirlo.” 

Del mismo modo India está buscando un sistema de vigilancia global que podría convertirse en parte central a un compromiso, suponiendo que Estados Unidos se comprometa a ciertos términos.

Y ahí esta el pinto clave. No importa cuán sencilla y lógica sea la necesidad de un MRV bien diseñado, un acuerdo en Cancún dependerá en la calidad de los compromisos que países como los Estados Unidos estén dispuestos a hacer a cambio de la transparencia en los informes de emisiones y acciones. Quedamos pendientes.