El pueblo tiene derecho a agua limpia, aire puro y transparencia en el gobierno

Las acciones del Presidente Trump para limitar la participación pública y permitir la construcción de tuberías de energía sucia, poner en peligro nuestra salud con ataques sobre la Agencia de Protección Ambiental e intentar aumentar el rendimiento del gas son pasos que ponen en peligro nuestra salud y bienestar.

Las acciones Ejecutivas del Presidente están diseñadas para permitir y acelerar la aprobación del oleoducto Keystone XL y allanar el camino para aprobar la tubería de acceso de Dakota y debilitar la revisión ambiental de los proyectos que puedan amenazar el bienestar de nuestras familias y perjudicar a nuestro país.

Estas acciones dejan claro que Trump elige beneficiar a las grandes empresas de petróleo y gas aunque sus acciones pongan en peligro al pueblo estadounidense.

Millones de estadounidenses se opusieron a los proyectos de acceso de Dakota y Keystone XL reconociendo que los riesgos al agua, al aire y al cambio climático, eran demasiados altos y que nuestro país tenía poco que ganar con estos proyectos de energía sucia. Está claro que al Sr. Trump le importa muy poco que tengamos agua pura o aire limpio y menos aún, los intereses de las tribus cuyas tierras sagradas y agua serán contaminadas.

Las acciones de Trump están claramente orientadas a limitar la participación pública por parte de los estadounidenses en la aprobación de estos masivos proyectos de energía sucia y prácticamente eliminar la consideración de la salud, seguridad, e impacto ambiental con el fin de facilitar que las empresas multinacionales extiendan la contaminación a lo largo del país y el continente norteamericano.

Insistiremos en que nuestras voces se escuchen en todos los asuntos que afectan la salud y el bienestar de nuestro país. Hacemos un llamado a Presidente de Trump para dar prioridad a los estadounidenses sobre los beneficios a los contaminadores.

El Presidente Trump ha hecho al lado el medio ambiente y la salud y con ello el derecho del público de saber lo que está haciendo el gobierno:

  • Trump quiere forzar la aprobación del oleoducto de arenas de alquitrán Keystone XL. Pasamos años en esto. Se determinó que no está en nuestro interés nacional. Es lo que importa. Ya hemos determinado que el oleoducto de arenas de alquitrán sucio significa grandes ganancias para las grandes petroleras y destrucción del medio ambiente para el resto de nosotros. Es una mala idea que debe ser rechazada.
  • Al ordenar una revisión que respalde la tubería de acceso de Dakota, Trump pidió maneras de ilegitimar las preocupaciones de los pueblos indígenas americanos. Los Standing Rock Sioux tienen derecho a ser escuchados a través de una declaración de impacto ambiental. Ese derecho debe ser honrado, no pisoteado para beneficio de la empresa petrolera.
  • Con la orden que pone alto a las subvenciones de la Agencia de Protección Ambiental (EPA), Trump ha arrasado con las protecciones esenciales para nuestra gente. Protecciones tales como el monitoreo de los niveles de plomo en el agua, la contaminación del aire y los químicos tóxicos en nuestro suelo. Lo que es peor, lo ha hecho en secreto, ha impuesto una orden de mordaza sobre la Agencia para asegurar que el público no se entere sobre sus gestiones. Nuestro mensaje es simple:​

    Sr. Trump, deje que la EPA haga su trabajo y no trate de esconder sus acciones del pueblo.

  • En cuanto a la declaración del Sr. Trump ante los fabricantes de autos de que es un ambientalista: Son las acciones las que cuentan. Duplicar el rendimiento de la gasolina en nuestros autos reduce la contaminación peligrosa que contribuye a las catástrofes climáticas y le ahorra dinero a nuestras familias a la hora de llenar el tanque de gasolina. Deshacer el progreso logrado solo perjudica a nuestras familias y nuestros hijos. No se logra nada con ello.

La presidencia de Trump y el congreso encabezado por Republicanos han organizado un ataque sin precedentes sobre el agua, el aire limpio, las tierras públicas y un mundo habitable para nuestros hijos. Es una verdadera vergüenza y lucharemos en contra una agenda que pone los beneficios de los que contaminan muy por encima del pueblo y nuestro futuro en este planeta.