Las bajas temperaturas en el invierno nos obliga a subirle al termostato para mantenernos calientitos en casa, pero esta comodidad no tiene por qué afectar nuestra billetera ni el medio ambiente.
Nuestra colega Elizabeth Noll nos provee unos consejos fáciles y de bajo costo para ahorrar dinero y energía mientras mantenemos la casa cómoda en el invierno y ayudamos al planeta también.
- Revisa el filtro del equipo de calefacción cada mes. Si está sucio, hay que reemplazarlo. Un filtro sucio reduce el flujo del aire lo cual hace que el sistema trabaje más y desperdicie energía. Si necesitas cambiar el sistema por completo, busca uno que lleve la etiqueta de Energy Star.
Invierte en un termostato programable que reduce la temperatura automáticamente durante el día y la sube a la hora que indiques. Este dispositivo ahorra entre 20% y 30% de energía, por lo tanto el costo de unos $100 se paga por sí solo. Aprende más aquí.
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Imagen cortesía de EPA